La huella de la nariz de tu gato es tan única como tu propia huella dactilar. ¿Lo sabías?

¿Quieres saber por qué? Adelante, sigue leyendo porque hoy te contamos varias curiosidades  sobre la pequeña trufita de tu felino amigo.

Huella nariz gato = huella dedo humano

“De noche todos los gatos son pardos”, ¿o no? Pues no, en este caso la sabiduría popular en forma de refrán se equivoca bastante: no todos los gatos son iguales y para un experto es relativamente fácil identificar a cada animalito fijándose en un rasgo único y peculiar: las volutas que forman la pequeña nariz del gato, unas formas únicas que hacen que este
apéndice sea único en el mundo entero. La nariz de tu gato es, así, una especie de huella “dactilar” que identificaría a tu pequeño amigo entre millones de gatos y gatas  aparentemente iguales.

Si tienes el valor de acercarte muy cerca a la naricita de tu gato enseguida verás que la almohadilla rugosa que conforma este apéndice nasal no es tan lisa como parece. Este triángulo carnoso de color rosado, anaranjado, marrón clarito, negro, etc., tiene un diseño único que empieza a dibujarse en el vientre de la mamá gata; unas hendiduras, curvas,
depresiones y relieves diminutos que forman un dibujo único y “personal”, una huella felina única e irrepetible.

Quizás ahora mismo te estás preguntando por qué no se utiliza esta peculiar huella no dactilar para identificar a los mininos caseros en lugar del microchip. La respuesta es bastante lógica: por seguridad del humano y del gato. ¿Te imaginas entintar la nariz de un felino para imprimir su huella única en un pedazo de papel? Sería una aventura de riesgo mucho más peligrosa que subir al Teide en enero con chanclas y bañador 😉

Más curiosidades sobre la nariz de tu gato

Como suele suceder con este tipo de artículos, al buscar información para redactarlo me he encontrado con algunas curiosidades sobre la nariz del gato que me gustaría compartir
contigo, a ver qué te parece:

• La nariz del gato tiene un poder olfativo 14 veces superior al del ser humano común.
• El gato olfatea siempre la comida antes de ingerirla, si un gato pierde el olfato, la primera consecuencia visible será que dejará su bol de pienso completamente lleno.
• La nariz del gato debe estar húmeda y tibia. Si está seca, puede ser síntoma de deshidratación. Si está excesivamente húmeda puede indicar que está empezando a coger un buen catarro felino.
• El color de la nariz de tu gato depende de su edad y de su raza, pero la intensidad del color dependerá de su estado de ánimo y del momento que esté viviendo en ese momento. Por ejemplo, si está activo y jugando, la naricita tomará un color más intenso y si está relajado, la nariz tendrá un color algo más pálido.
• Un rasguño en la nariz de tu gato puede indicar que se ha metido en problemas con los gatos del vecindario. Si tu gato aparece cada día con una herida nueva, no lo atribuyas a “cosas de gatos”, acude a un especialista en comportamiento felino que estudie tu caso.

Por cierto, ¿sabías que también los perros tienen una huella no dactilar única? Está en su trufa y, como sucede con los gatos, el análisis de esta huella “naricil” identifica a cada uno de los millones y millones de animales de esa especie.

¿Conocías estas curiosidades sobre la nariz del gato? ¿Cuál te resulta más interesante?  Adelante, escribe un comentario, nos encantaría leerte…