Un perro en alerta no es un perro relajado. Puede estar tranquilo pero eso no significa que su cuerpo o su mente estén descansando, si no que está esperando que ocurra algo, bien porque no sabe si tiene que ocurrir, bien porque ya ha ocurrido anteriormente.

La posición de alerta en un perro no conlleva ningún tipo de preocupación, simplemente expectación. No tiene porqué ocurrir nada, pero es posible que el perro esté en un ambiente nuevo o poco conocido, y necesite observarlo antes de relajarse en él.

Características físicas

• Usa la mirada con intensidad, pendiente de su entorno.
• Orejas hacia arriba poniendo atención a cada sonido que le llega.
• Cuerpo ligeramente tenso, preparado para iniciar movimiento si hiciera falta.
• Cuatro patas en el suelo, paralelas y bien posicionadas.
• Boca cerrada (necesita todos los sentidos, incluido el olfato y el oído y la boca abierta no permitiría captar bien estímulos olfativos o auditivos).
• Rabo relajado pero no completamente hacia abajo, preparado para actuar como timón is fuera necesario.

Observaciones:

Cuanto más cierre la boca más cerca de tener alguna sospecha estará, y cuando más la abra, más relajado.

Las orejas también nos marcan hacia dónde se equilibra la balanza: cuanto más hacia arriba y hacia delante, más pendiente está del entorno, mientras que si las tiene bajas o hacia atrás, será señal de necesitar prestar menos atención con todos sus sentidos.

El rabo también es un buen indicador, pues cuanto más alto y tenso esté, más tenderá a sospechar de algo en concreto.

La tensión corporal es un factor muy importante también en la comunicación canina, aunque a veces, si no estás acostumbrado a observarlo, puede resultar algo más difícil de percibir.

¿Sabrías decir cuál de los 4 perros de la foto está más relajado y cuál tiene una posición más cercana a sospechar algo?

No dudes en dejar un comentario con tu respuesta y los motivos que te llevan a pensar eso 🙂

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