El trabajo con animales requiere tener concentración y adquirir las habilidades necesarias que te permitan interactuar con ellos y llegar a un buen nivel de entendimiento mutuo. Para poder lograr todo esto es necesario tener tiempo, paciencia y constancia.
Efectivamente necesitas dedicarles TIEMPO, esa palabra que hace que a muchas personas les recorra un escalofrío por el cuerpo. Si no tienes tiempo para dedicarle a tu perro, es mejor que vayas pensando en otra cosa… Sin tiempo no podrás disfrutar de él ni aprender su lenguaje o hacer que aprenda el tuyo.
Sin tiempo caerás en el error de dar por hecho que el perro debía saber lo que ya le has enseñado anteriormente, y que ahora no tienes tiempo de volver a enseñarle, por lo que penalizarás o castigarás una actitud que no te parece apropiada, cuando lo más probables es que con unos minutos más puedas hacerle comprender qué es lo que esperas que suceda.
Es la falta de tiempo la que nos impide apreciar los detalles que nos regala el perro de su estado y actitud en un entrenamiento o de su inseguridad, excitación o miedo en una situación cualquiera del día a día.
Por la falta de tiempo dejamos de permitirle tomarse sus momentos para comportarse como un perro, de hacer cosas de perro, de ir y venir, olfatear, correr, jugar, ladrar… Y reducimos su existencia a unos ratos de alegría en la calle y normalmente, a la soledad.
Por eso es importante saber de qué tiempo dispones para cuidarlo y/o entrenarlo, porque si no estás dispuesto/a a reservar los momentos necesarios para compartir con tu peludo una buena vida y una educación correcta, es mejor que te plantees la posibilidad de cuidar y dar tus mimos a perros de protectoras o albergues donde puedas disfrutar de ellos en los ratos que tu vida te permita, pero no cargues sobre tus hombros la responsabilidad de tener una vida animal que no puedes alimentar con el tiempo que deberías.
2 comments
Join the conversationjuani ruiz - 9 de noviembre de 2015
A ver si alguien me puede ayudar. Yo tengo dos bichones maltes,una hembra de 6 años y un macho de un año. El macho es muy escandaloso,en cuanto olle algun ruido en el portal o viene alguien a casa,no para de ladrar. Q puedo hacer para q no ladre tanto??
Miriam Sainz Sánchez - 13 de noviembre de 2015
Hola Juani. Trabajar para que un perro deje de ladrar a los ruidos del portal es relativamente sencillo, aunque requiere constancia y dedicación. Como siempre os digo con los casos concretos, si no veo al perro no puedo darte una fórmula mágica: simplemente no existe. Habría que valorar sus reacciones en otras circunstancias y valorar su comportamiento tanto en la casa como en la calle, comprobando si este mismo comportamiento es extrapolable a algún otro momento. Si varía según las horas del día y la intensidad de los ruidos… ¡muchas cosas!
Te recomiendo que consultes a algún entrenador canino (¡siempre trabajando con respeto al perro!) de tu zona para que pueda hacer una sesión de evaluación y poder trabajar contigo y con tu perrete.