Incómoda, ¡muy incómoda! Y ese es el principal problema que les genera a las personas que su perro realice esta conducta. Pero, ¿por qué? Bueno, vamos a ir viendo poco a poco los «por qués» y qué puede significar que tu perrito o perrita (sí, también perrita) monte piernas, perros, mantas o lo que se le ponga por medio.
La monta de perros en parques y reuniones caninas, es muy habitual, y entenderla nos ayudará a saber cómo gestionarla.
¿Por qué nos molesta tanto?
- Principalmente por pudor. Ver a dos (o más) perros montando o que tu perro quiera «acosar sexualmente» a otros perros o a personas es realmente vergonzoso para la mayoría de humanos que comparten su vida con un can. Pensamos en la conducta de monta como algo estrictamente sexual, y tener un animal que sólo piensa en el sexo nos ruboriza en exceso. ¿Cómo explicar que nuestro compi de cuatro patas en el fondo es un adorable peluche cuando con fuerza y obsesión saluda a una visita secuestrándole su pierna para fines… oscuros? Es difícil de explicar… si no sabemos la respuesta correcta.
- Por descontrol, porque cuando nuestro perro entra en esa dinámica nos cuesta mucho conseguir que pare de hacer esta conducta. Quitarle con la mano, regañarle, castigarle… no parecen tener grandes resultados para evitar que vuelva a comportarse así para la siguiente ocasión, ¿verdad? Entonces, si no funciona… ¡no lo repitas!
- Por inseguridad, pues aunque estamos convencidos de que tiene un problema de obsesión por el sexo, a veces nos cuesta creer que se manifieste de manera tan continuada, tan persistente y tan exagerada como lo hace. Sin embargo, puede pasarse días sin montar nada o a nadie, y eso desconcierta a cualquiera…
Sin embargo cuando este comportamiento ocurre, no nos paramos a pensar en las causas por las que nuestro perro tiene esa reacción, sino que intentamos como sea que no lo manifieste, y como mucho, que no lo vuelva a manifestar, cortándolo cuando comienza a dar muestras de querer hacerlo. Así que una y otra vez el problema se repite, y en ocasiones optamos por recluir a nuestro perro o apartarlo de vivir experiencias sólo por el hecho de no saber controlar la conducta de monta.
Motivos por los que un perro realiza conductas de monta
Enfermedad
¿Alguna vez te has planteado que a lo mejor lo que le pasa a tu perro tiene más que ver con un problema de salud que con una conducta sexual? Pues es una de las posibles explicaciones. Si tu perro comienza de repente a ofrecer este comportamiento que antes nunca había mostrado y además no encuentras relación con el resto de posiblidades que muestro en este artículo, llévale para que le hagan un chequeo en el veterinario. Puede tener alguno de los siguientes problemas médicos:
- Alteración en los niveles de estrógeno o testosterona
- Tumores en las Células de Sertoli o en las células granulosas
- Enfermedades que afectan al perfil del olor: del saco anal, el tracto urinario, infección de orina o infección vaginal, alergias en la piel o priapismo. Verás que pasan mucho tiempo lamiéndose o frotándose.
Excitación o sobre estimulación
Cuando nuestro perro siente mucha emoción o tiene estímulos que le generan mucha excitación, en ocasiones puede liberarla realizando una conducta de monta. Esto puede ocurrir por ejemplo, cuando conoce a un perro nuevo o cuando ve por primera vez a una persona que no conocía. Con los perros lo podemos ver fácilmente, pues algunos de ellos están correteando y muestran mucha alegría en el parque, a la vez que montan a un/a nuevo/a compi de juegos.
Esto es algo que tenemos muy en cuenta en nuestras clases grupales, y que siempre comentamos a nuestros clientes: es importante trabajar la tranquilidad en el perro para conseguir que sea equilibrado.
Estrés o ansiedad
Casi por el mismo motivo que en el caso anterior, el estrés o la ansiedad pueden desencadenar en que el perro haga la conducta que nos ocupa. Suele ocurrir cuando el perro está excitado (no en el terreno sexual) y a la vez molesto en algún sentido, dos emociones contrarias que le generan inquietud. Tanto si es generado por estrés o ansiedad como si lo es por excitación o sobre estimulación, son conductas de desplazamiento. Estas, generadas por falta de gestión de la situación, nos llevan a que se termine por realizar la monta. Si esto se mantiene en el tiempo, puede llegar a ser un desorden compulsivo, por eso es importante prestar atención al verdadero motivo por el cual el perro monta.
Comportamiento sexual o conducta aprendida
Por supuesto no hay que olvidar que nuestro perro puede estar realizando la conducta de monta como un comportamiento sexual, con hembras en celo habitualmente. Además, si el macho ha tenido experiencias sexuales previas, al ser un comportamiento auto-reforzante, lo hará también para buscar el placer que le reporta. Tanto es así que incluso machos castrados pueden llegar a eyacular. La masturbación puede aparecer tanto en machos como en hembras.
Jerarquía o dominancia
Como ya he expuesto en artículos anteriores, el mito de la dominancia en perros domésticos no deja de ser eso: un mito. Tu perro no es más dominante por montar a otros perros ni más sumiso por ser el «montado».
Tampoco intenta ocupar la posición de «líder de la manada» cuando monta tu pierna, ni dejar claro que es quien manda cuando lo hace con otra persona (¡o cosa!). Poco a poco vamos desenterrando mitos tan arraigados en el conocimiento popular, que, sin embargo, los estudios hace tiempo que han dado por caducos.
La dominancia como tal se ha utilizado para fines muy oscuros o para intentar maquillar la falta de conocimiento. Eso hace que a gran parte de los profesionales, este término nos de grima. La dominancia se muestra, pero ni mucho menos, como es vulgarmente aceptada en la sociedad, en referencia a los perros y perras.
En definitiva…
La conducta de monta es mucho más que un simple comportamiento sexual que nos puede ruborizar. Como ocurre en todos los comportamientos del perro, hay un por qué que debemos analizar y determinar si puede o no suponer un problema. Intentar por imposición que el perro deje de montar a otros perros, personas o cosas no ayuda en ningún caso. Al revés, genera más frustración, más sobre estimulación, más estrés o ansiedad… Lo que hay que trabajar son estos posibles problemas por separado. En caso de que la conducta de monta la realice por motivos sexuales, tendremos que determinar si queremos o no que se culmine el acto sexual. Y si no es así, evitar situaciones en las que el perro pueda encontrarse con hembras en celo ya que la imposibilidad de cubrirlas, le generará una alta frustración.
Recuerda que la cría no controlada y sin licencia, además de ser ilegal, incrementa el problema de abandonos exponencialmente.
571 comments
Join the conversationCarolina - 12 de abril de 2019
Hola, tengo una pastor aleman de 1 año y medio, hace 1 mes y medio adoptamos a un Husky de 9 meses, en cuanto llego a la casa nuestra pastor no lo queria, pero con el paso de los días se fue adaptando a él, despues de que empezaron a jugar juntos, el Husky quiere montarla siempre, para donde ella va, él va detras, olfateandola, a la primera oportunidad que se le presenta intenta montarla, lo hemos regañado y retirado, pero nada funciona. él siempre quiere estar en donde ela está. Hace una semana esterilizamos al Husky esperando que esto cambiara su actitud, pero aún persiste con esta conduca. ¿Qué debo hacer para corregir este comportamiento?
Miriam Sainz - 21 de abril de 2019
Hola Carolina, muchas gracias por tu mensaje.
Nos nos indicas hace cuánto castrasteis al macho. Normalmente, en la castración disminuyen las conductas sexualmente dimorficas pero, para comprobar los efectos, hay que esperar un tiempo.
Hay algunos casos en los que la conducta sexual del perro disminuye parcialmente o algunos otros en los que no desaparece del todo. Suele estar directamente relacionado con experiencias o comportamientos anteriores. Esto es debido a que la conducta sexual del macho es menos dependiente de la acción hormonal que la de la hembra.
Yami martinez - 6 de abril de 2019
Hola, tengo una perrita labrador y esta por cumplir 4 meses. Tengo miedo porque hay un macho de 7 años y anda en celo, ¿podria el abusar de ella? Tengo miedo porque tengo que dejarla en el patio ya que ella no soporta el calor dentro de la casa. Respondame lo favor
Miriam Sainz - 6 de abril de 2019
Hola Yami, gracias por tu comentario.
No creo que el término sea «abusar». En este caso es una perra en celo delante de un macho, que seguirán sus instintos y es muy probable que copulen si tienen la oportunidad, en el momento en que ella esté preparada, buscado tanto por uno como por otro.
Te aconsejo que estén en ubicaciones diferentes porque, aunque la hembra ha sido muy precoz con su celo, sus hormonas harán que en algún momento busque la monta.
Cristina García - 4 de marzo de 2019
Hola! Tengo una cachorrita pug de 4 meses y otra pug de 7 años. Primero que nada, la chiquita siempre va y muerde a la grande como jugando. Puede estar mucho rato mordiendola y a la grande no le gusta y corre o se defiende pero no agresiva. No se si es parte de ser cachorrita que muerde absolutamente todo.
Segundo, he notado que hace eso de montarse en mi pierna (la cachorrita) cuando me ha estado rogando por atención (cuando hago trabajo en la compu)… creo que solo lo ha hecho conmigo (tengo dos hermanos). Cuando lo empieza a hacer si dura ratito… pero es hembra y de 4 meses! No sé porqué sea… para esto, mis dos pugs son super consentidas y chifladas, todo el tiempo estan de chicles conmigo, las amo y duermen en mi cama, asi que atención no les falta, solo pasa lo de que se monta en mi pierna cuando estoy trabajando. No sé porqué sea!
Miriam Sainz - 27 de marzo de 2019
Hola Cristina y muchas gracias por tu comentario.
Es pobable que, al ser cachorrita, quiera toda la atención día y noche para ella… No te preocupes porque si aprende cuándo sí y cuándo no tendrá atención, rápidamente asociará que el hecho de que tú estés en el ordenador, significa que tiene que buscarse el juego ella sola 🙂
Y sí, los cachorros tienen que soltar los dientes y aprender también las normas sociales… que pasan por no morder todo lo que esté a su alcance y a controlarse con sus congéneres y el resto de animales, también humanos.
Iria - 6 de febrero de 2019
Buenas tardes,
Buceando en la red sobre lo que nos está pasando en casa con nuestros perros, me he encontrado éste artículo y me animo a preguntar para tener una opinión profesional aparte de la del veterinario.
Tenemos dos perros, un macho sin castrar y una hembra castrada. Tienen muy buena relación, se cuidan y respetan mutuamente. Pero resulta que hace unos días el macho ha empezado a montar a la hembra, de forma obsesiva. Lo achacamos a falta de ejercicio, asique salimos a dar un paseo bien largo por la playa, pero sigue igual. Y con otros perros se comporta como siempre, muy tranquilo, sean machos ó hembras, pero es encontrarse con su compañera y está fuera de sí. Lo que nos tiene mosqueados es que sólo le pase con ella, cuando previamente y durante más de tres años han convivido sin ningún problema, todo lo contrario. Le hicimos una analítica a ambos, la de la hembra estamos esperando el resultado, al macho, sólo da alta la testosterona, pero el veterinario lo achaca a estar tan excitado y no le da mayor importancia. A mí me tiene dudosa, si la subida de testosterona es causa ó efecto de dicho comportamiento. Sí es cierto que en los días previos a comportarse así, olió un montón de pises de perras que tienen actualmente el celo, y otros propietarios de perros nos han comentado que sus perros también estaban más excitados últimamente. No sé, si la analítica de nuestra perra da normal, ¿será un simple problema de conducta? ¿Puede el olor de otras hembras en celo provocar ese comportamiento en él, aunque nuestra perra no tenga celo? ¿Puede la conducta elevar la testosterona, ó es al revés? Muchas gracias por adelantado y un saludo
Miriam Sainz - 10 de febrero de 2019
Buenas tardes Iría,
Muchas gracias por tu consulta. La verdad es que es un tema complejo y habría que tener en cuenta muchos aspectos tanto de tus perrertes como del entorno.
Los normal, es que tú perro tenga los niveles de testosterona elevados porque haya detactado alguna perra en celo. Gracias al órgano de Jacobson pueden hacerlo a varios kilómetros de distancia. Puede ser una perrita de tu mismo edificio, de otro o incluso que simplemente paso por allí y dejó su olor impregnado.
Otra opción algo menos probable, es que tú perra tenga algún resto ovárico aún castrada. Esto se puede dar por diversos motivos:
– que el veterinario haya dejado restos de tejido a la hora de hacer la cirugía.
– que, aunque la cirugía esté bien hecha, la presencia de tejido ovárico en la cavidad peritoneal, puede vascularizar y ser funcional.
– que exista tejido ovárico fuera del ovario (ectopico), que siga siendo funcional.
Esperamos haber sido de ayuda y si tienes más dudas nos puedes volver a escribir
Alvaro - 21 de enero de 2019
Por supuesto que existe la dominancia en perros y el nivel jerárquico. Este artículo se equivoca mas de lo que acierta.
Miriam Sainz - 22 de enero de 2019
Buenos días Álvaro, y muchas gracias por tu comentario.
Reconozco que en el momento de escribir este artículo estaba centrada en la importancia de desmitificar la tan recurrida dominancia como base del adiestramiento.
Existe la dominancia pero poco se parece a la importancia que se le otorga, y no tiene una correlación de jerarquía (si A es dominante sobre B y B lo es sobre C, A no tiene por qué ser dominante sobre C).
Las dominancias tienen más que ver con momentos puntuales y situaciones específicas y con Estados de ánimo, que con formas de ser o roles permanentes.
Agradezco mucho tu comentario y me encantaría saber tu punto de vista 🙂
Karina - 20 de enero de 2019
Hola! Consulte tu artículo porque mi perro ha comenzado con este comportamiento hacia mi perra, el es un beagle de 5 años y mi perra tiene 13, ella está esterilizada desde los 7 años, el caso es que nunca se había comportado así con la perra, la sigue, la lame y a querido montarla, ella es una chihuahua pequeña y ya muy ancianita, la perra lo muerde pero nos preocupa que pueda lastimarla y no dejarla dormir. Pensamos que debe ser alguna perra de fuera y este confundido, a él nunca lo hemos cruzado de hecho es agresivo con otros perros y perras, será alguna cuestión de estrés también?
Miriam Sainz - 22 de enero de 2019
Buenos días Karina y muchas gracias por tu comentario.
¿Habéis tenido algún cambio reciente que haya podido hacerle tener más estrés que de costumbre?
Por ejemplo cambio de casa, diferencias en sus rutinas habituales, cambio de alimentación, algún mal encuentro con algún perro fuera de lo habitual…
¿Puede ser quizá algún dolor físico en el perro?
Alonso - 19 de enero de 2019
¡Hola buenas noches! tengo un problema desde hoy, ocurre que mi siberiano de 3 años está muy cariñoso conmigo (algo muy raro en él ya que suele ser muy parco) y hoy en todos los intentos de juegos que he tenido con él en el jardín solo ha intentado pisarme, no sin antes mostrarme escenas muy cariñosas jajaja. Lo curioso es que solamente lo hace conmigo, a mi hermano menor no le hacía dichas escenas. También me han dicho que éstos días ha estado un tanto »rebelde» y »contestón» algo muy raro en él ya que es un ángel. Aclaro también que no ha pisado nunca.
Y por último, ocurre que estuvo tuvo algunas deposiciones sueltas por un par de días, pero ya no… no sé si tal vez tenga relación dichos comportamientos ¿Debería descartar enfermedad? Saludos cordiales.
Miriam Sainz - 22 de enero de 2019
Hola Alonso, gracias por tu comentario.
Yo sería lo primero que haría. No tiene que ser nada grave pero puede que no se esté encontrando bien.
Cuéntanos qué te dicen en el veterinario, y confiemos en que esté todo bien.
Luisiana Lazo - 7 de enero de 2019
Hola, buenas noches! Tengo dos perros, una hembra podler con Bichon de 4 añitos, la cual esta esterilizada; y otro macho que es podler y tiene 10 años y el no esta castrado; desde mas o menos mediado de diciembre una perrita en el edificio que vive en el piso de abajo esta en celo y el se la pasa llorando y persigue a mi perrita y la lame, correteay se le monta, casi no come y no duerme; tal es así que mi perrita le gruñe y lo ataca y pues casi no duerme por culpa de él y pues nosotros casi no descansamos por esa situación. Queria saber si eso es normal o es que de plano como ya esta en los diez años presenta algún problema? Muchas gracias!
Miriam Sainz - 11 de enero de 2019
Hola Luisiana, muchas gracias por tu mensaje.
¿Ha comenzado ahora con este comportamiento y previamente había estado conviviendo con la perrita? ¿No lo había hecho antes ni con ella ni con otra perra?
Andrea - 6 de enero de 2019
Hola he leido algunos casos pero no logro asociar ninguno al mío. Tengo dos hermosos beagles, Luna de 3 años y Santiago de 10 meses. Santiago llegó a nuestra casa de casi 2 meses y a esa temprana edad hacía por montar a mi Luna. Ahora que está más grande de 10 meses se ha vuelto un acosador jeje…. No la deja tranquila ella nisiquiera está en celo pero el busca montarla. Y otra cosa que me llama mucho la atención es que solo busca lamerle los ojos.. Me preocupa que pueda causarle alguna infección por estarle molestando mucho en sus ojitos. Es un tremendo no sabemos como más corregir ese comportamiento ya que es bastante necio…. Si pudieran ayudarme con algún consejo les estaré agradecida.
Miriam Sainz - 11 de enero de 2019
Hola Andrea, gracias por tu mensaje.
Da la sensación de que los comportamientos que indicas son repetitivos y obsesivos, y cuando tenemos estos comportamientos exagerados siempre hay detrás picos puntuales o crónicos de estrés.
Me encantaría saber cómo se comporta tu perra cuando Santiago lame sus ojos o intenta montarla.
Creo que deberías buscar ayuda profesional para hacer una sesión de evaluación que pueda ayudarte a determinar cómo manejar la situación.
De momento mantendría a los perros separados temporalmente y de forma intermitente, y al juntarles les propondría diferentes cosas que hacer juntos, pero individualmente. Por ejemplo ejercicios o trucos, sesiones de relajación y masajes, juegos de olfato… De alguna manera les mantenemos juntos enseñándoles otra forma de «estar».
Marta - 4 de enero de 2019
Hola! Lo primero quiero felicitarles por el artículo y por contestar pacientemente a las dudas de los usuarios 🙂
Verán yo tengo dos perros, un dálmata de 10 años que compré cuando tenía solo dos meses y un galgo de unos 4 años que adoptamos hace poco más de dos años, vivimos en un piso muy muy pequeño y vamos a tener un bebé!
El caso es que por Vaquero el galgo, ningún problema porque es un perro encantador, pero Otis, el dálmata, aún con diez años sigue siendo muy nervioso y muy bruto, y desde hace no mucho le ha dado por montar a todo perro que ve, incluso a veces a Vaquerito! y no me gusta nada porque le hace daño y me da miedo que lo vaya a intentar también con la niña. Además a Vaquero no le respeta el espacio, lo empuja, si Vaquero está tumbado donde quiere tumbarse él se le tumba encima para hacer que se levante y se vaya, y si no estuviera pendiente le quitaría la comida.
Con otros perros no tiene otra manera de jugar que no sea dándoles por detrás, va directo al grano, y eso que de pequeño me lo llevaba todos los días a un parque donde jugaba con muchos otros perros y no hacía nada de eso incluso antes de estar castrado.. ahora ya no corre ni juega como antes así que lo que hacemos es dar paseos largos todos los días, pocas veces los llevo al pipican.
Más que nada mi inquietud es cómo se vaya a comportar con la niña, porque no sé si será por la edad pero últimamente está muy gruñón y muy borde ☹️
Por favor espero su respuesta, muchas gracias y feliz año nuevo ?
Miriam Sainz - 11 de enero de 2019
Hola Marta, gracias por tu comentario 😉
Efectivamente el factor edad tienes que tenerlo en cuenta. Es posible que sus capacidades cognitivas estén mermando así como las físicas, es decir, se es un perro que ya no es «un chaval», y eso también causa mella en nuestros compañeros peludos.
El hecho de que monte a otros perros o a Vaquero no tiene que significar que montará al bebé. Es más, puede coger el papel de «protector» y que nadie respire más fuerte al lado de la pequeña, o directamente pasar de ella. En cualquier caso no hay un comportamiento en estos casos que se pueda prever. Incluso con esta niña se puede mostrar de una manera y si en un futuro hay otro bebé, de otra diferente.
Lo primero que haría sería confirmar que no tiene dolores y que a nivel veterinario está bien, con un análisis que, a su edad, deberías hacer anualmente.
Y lo siguiente, buscar aquellas cosas que le puedan desencadenar estrés o alta excitación. Trabajaría juegos de olfato y juguetes congnitivos también… Lo importante es llegar al por qué está, de repente, teniendo estos comportamientos.
Feliz año 😉
Carlos - 1 de enero de 2019
Buenas!
Mi perro tiene 4 años, ya de por sí es nervioso y es de tamaño mediano/grande (es mestizo, y una parte es de setter gordon).
Siempre que coincide con otro perro (de 1 año) con características físicas y actitudinales similares (muy nervioso también), el mío está obsesionado en montarle. Es que no le deja ni respirar. Leyendo el artículo, descarto la posibilidad de dominación. Hasta ahora ambos dueños pensábamos que era por eso. Pero al leerlo, ¿puede que el perro de 1 año estimule demasiado a mi perro? (solo lo hace con este) Y por otro lado, ¿me aconsejas evitar la monta, incluso haciendo que no coincidan? En la casa de la esquina hay una perra en celo, y mi perro, obviamente, lo sabe. Quizás esto todavía le estimule más (aunque la monta al perro de 1 año se la hace siempre).
Gracias Miriam!! Saludos.
Miriam Sainz - 11 de enero de 2019
Hola Carlos y gracias por tu mensaje.
Tiene toda la pinta de que la monta se hace por la excitación de los dos perros; perretes nerviosos que se encuentran y se disparan a jugar, pero que ninguno de los dos sabe cómo gestionar, o al menos tu peludo.
No me preocuparía tanto en evitar la monta en sí como en hacer ejercicios de relajación y juegos de olfato y cognitivos con ambos perros, incluso sería fenomenal hacerlo con los a la vez. Cambiarles un poco el chip y, y si no tienen problemas con compartir juguetes, ponerles 3 ó 4 con comida dentro, como kongs o pelotas, incluso botellas vacías con agujeros para que salga el pienso o cartones de brick (¡además así recicláis lo que en principio es basura! 😉 ). Separadles y continuad la vuelta por separado, o con distancias, y volved a juntarles pero «con algo diferente que hacer» más allá de jugar como locos o montarse.
También en época de celos los perros están excitados sexualmente, y al no poder satisfacerse comienzan a tener comportamientos fruto del estrés o la ansiedad. Cuando esto ocurre, necesitan dar salida a ese estrés y si tienen la posibilidad, como en este caso, de desfogarse exageradamente (no de manera sexual) con un compi que además también tiene una activación muy alta, pues les viene como anillo al dedo.
Si probáis estas cosillas, cuéntame cómo van y lo que van haciendo 🙂
Irene - 23 de diciembre de 2018
Hola! Qué maravilla de post! De lo que hay en internet es de los pocos que son útiles de verdad y no dicen los típicos mitos que no sirven para nada… Muchas gracias por escribir, de verdad!
Leo y busco esto porque tenemos un Chow Chow de 5 meses que lleva unos días empezando a montar (solo a mí y otra chica, a mi marido nada). Parece que son en picos de estrés, cuando tiene miedo (paseo de noche) o cunado está sobreexcitado (cuando está muy nervioso por algo).
Creemos que es por estrés o ansiedad como explicas en el post pero la duda es si es bueno dejarle que suelte el estrés haciendo la monta o deberíamos cortar el comportamiento y decirle que NO.
¿Significa algo que me monte a mi pero a mí marido nunca?
Muchas gracias por vuestra ayuda!!
Y feliz Navidad!!
Miriam Sainz - 24 de diciembre de 2018
Buenos días Irene, muchas gracias por tu comentario 🙂
No me empeñaría tanto en hacer que el perrete deje de montar, que por ser molesto y a veces incluso poder hacer daño, puedes simplemente bajarle (paciencia, porque no será ni una ni dos veces), como en hacerle juegos de relajación y olfato, y atajar el problema que provoca que monte. Es decir, que si es porque tiene miedo, entrenaría con él juegos de autoestima, propiocepción y juegos de resolución de problemas sencillos que iría incrementando de nivel, para que pueda reforzarse por conseguirlo por sus propios medios.
Si es por estar sobreexcitado, trabajaría con él juego y descanso para que pudiera ir cambiando de estado con mayor facilidad, y la sobreexcitación la controlaría mucho, aumentándola poquito para que le resultara fácil gestionarla.
Es posible que tu marido le de más confianza o que marque más claramente para el perro cuándo comienza o termina el juego, y al tener una comunicación más clara (que no tiene ni debe ser dura o con voz fuerte, simplemente consecuente en todos los casos), el perro reaccione mejor frente a estos estímulos.
Carolina Muñoz - 20 de diciembre de 2018
hola buenos dias. Como trabajo adicional cuido mascotas en casa cuñado sus dueños de van de viaje. Justamente tengo a dos perros machos a mi cuidado, un shitzu y un pekines. Ellos nunca se había visto pero inmediatamente que se conocieron comenzaron a montarse, no han parado desde hace un día y lo hacen a penas uno de ellos de descuida. He tratado de separarlos pero es difícil y no veo que funcione ya que al verse vuelven a hacerlo. Que puedo hacer en estos casos? Gracias y un saludo.
Miriam Sainz - 24 de diciembre de 2018
Hola Carolina y muchas gracias por tu mensaje.
Puedes mantenerlos separados con momentos puntuales en los que puedan verse, directamente o a través de alguna puerta o reja, y hacer con ellos ejercicios de relajación (si estás sola, al menos con el que más nervioso se ponga).
Deberás mantener una distancia larga (lo más larga que puedas dentro de la casa) para que la intensidad del ejercicio sea menor y puedan ser capaces de gestionarla mejor.
Cuando estén juntos, dales algo en lo que pensar: juegos de olfato (si no tienen problemas con la comida) e incluso algo de entrenamiento. Y antes de que vuelvan a «despistarse» y volver a las rutinas de monta, sepárales de nuevo y enséñales así que pueden hacer algo diferente a montarse cuando están juntos.
Ivette - 16 de diciembre de 2018
Hola
Tengo dos hembras Pastores Alemanes, las adopte del mismo criador,solo se llevan un ano,mientras la menor estaba pequena no paso nada,la cuestion es que hace un tiempo vienen enfrentandose terriblemente,la mayor por cualquier evento se le trepa a la otra queriendola dominar,la mete contra la pared o contra cualquier cosa,por todos los medios trata de tirarla al piso,incluso cuando la menor esta acostada ella trata de pararse encima,la menor solo le grune pero cuando pierde el control es cuando viene lo peor,los danos son graves,ya una perdio una oreja debido a un Otohematoma causado por una pelea,hemos tratado de todo,desde collares con corriente hasta entrenadores,no hay remedio y lo que mas temo es que un dia una de ellas pierda la vida.He llegado a contactar a rescatistas de Pastores Alemanes para darla y que alguien la pueda ayudar,se me parte el corazon pero creo va a ser la mejor opcion para ella,no quiero obrar mal pues amo a los animales pero esto es muy preocupante,me gustaria me dieran un consejo de si estoy haciendo bien o no en darla a rescatistas,ella sola es un perra espectacular pero no en convivencia….estoy realmente angustiada..Muchas Gracias,Ivette
Miriam Sainz - 19 de diciembre de 2018
Hola Ivette.
Tienes una situación muy complicada pero a veces hay que tomar decisiones uqe no nos gustan. Creo que esta en concreto de separarlas y permitir que la perra pueda ser feliz en otra familia es la más acertada en tu caso.
Son perros con mucho potencial que pueden hacerse, como estás viendo, mucho daño, y su bienestar pasa por mantenerse separadas.
Ánimo y cuéntanos qué decides finalmente.
Javier - 27 de noviembre de 2018
Mi perro tiene 4 años no le da muy frecuente lo de querer montar pero cuando le te da la necesidad de montar llora bastante que puedo hacer para que se tranquilice y no llore mucho
Miriam Sainz - 19 de diciembre de 2018
Hola Javier, gracias por tu mensaje.
Descarta un problema veterinario y ejercita su mente (tienes mucho juguetes mentales en el mercado).
Es posible que sus gemidos tengan que ver con su ansiedad, y trabajando la ansiedad en su día a día, cesarán.
¡Cuéntanos qué tal!