Conocemos como refuerzo al procedimiento que aumenta de posibilidades de que una conducta se repita, bajo la aplicación de un estímulo.
Podemos encontrarnos con dos tipos de refuerzos, el positivo y el negativo. Nada tienen que ver con algo bueno o algo malo, como cabría pensar por sus nombres, sino que hablamos en cualquier caso de procedimientos diferentes para aumentar, como ya he comentado antes, que la conducta que queremos en nuestros perros, se repita.