En la situación actual, las rutinas se han dado la vuelta y tenemos que lidiar con cambios continuos que nos afectan a las personas y también a los animales con los que convivimos.
En estas circunstancias excepcionales, son muchas las personas que han comenzado a teletrabajar desde casa, conviviendo así más horas de lo que acostumbraban con sus perros.
Si bien ya dedicamos un artículo a la necesidad de prestar atención a los trastornos derivados de la separación tras el primer confinamiento, hoy quiero hablar de la otra cara de la moneda, que es el teletrabajo y la permanencia en casa.