A veces creemos que nuestro perro muerde y por eso, antes de que ocurra, tensamos fuertemente la correa para alejarle de otros perros. La realidad es que en gran parte de los casos, ocurre al revés: el tirón de correa dispara la flecha para que el perro se lance a morder, sobretodo en una situación tensa (pero que comenzaba a gestionarse) como la del vídeo.

Me ha parecido especialmente instructivo porque a cámara lenta no hay duda. La tensión del perro negro es claramente visible desde el comienzo, pero más allá del intento de morder, ¿qué otras cosas podemos valorar del vídeo? Las señales de calma y apaciguamiento se dan continuamente. Mira al perro marrón: lametazos al aire, movimiento amistoso de la cola, movimientos lentos, evitación del contacto visual directo a los ojos del negro e incluso giro casi completo de cabeza y cuello, se chupa la trufa repetidas veces, posición de su cabeza por debajo de la cabeza del negro… y justo cuando el perro negro parece que relaja un poquito su tensión corporal, ¿qué es lo que ocurre? Que le llega un castigo a modo de tirón de correa… ¡Cuidado con no saber leer las señales de los perros!